SABIDURÍA Y PRUDENCIA

William Brayanes
Haz de Sabiduría
Admin


Cuenta la fábula que en un lejano palacio, un rey soñó que había perdido todos sus dientes. Así es que mandó a llamar a un sabio para que interprete tal sueño.

“¡Qué desgracia, mi señor! -le explicó el sabio- cada diente caído representa la pérdida de un pariente de vuestra majestad.”

-¿Cómo te atreves a decirme semejante cosa? -Replicó el rey enfurecido- y de inmediato ordenó a la guardia que le propinen al sabio, cien latigazos

Luego llamó a otro erudito para que interprete el mismo sueño. Este le explicó así:

“Hay gran felicidad de parte de la Divina Providencia: El sueño significa que tú vas a sobrevivir a todos tus parientes.”

Esta vez el semblante del rey se iluminó, y de inmediato ordenó que le dieran cien monedas de oro.

Uno de los cortesanos, intrigado le preguntó el por qué, si ambos sabios dieron una misma explicación sobre el sueño, el primero fue castigado, mientras el segundo, recompensado?

El Rey respondió:

Porque el segundo me lo explicó de manera más agradable. No es lo mismo decir que voy a perder a mis parientes, a decir que voy a sobrevivirlos a todos.

Querid@ amig@:

La verdad debe prevalecer en toda circunstancia, pero debemos tener sabiduría para decirla adecuadamente. Ser honesto no significa expresar, tosca o groseramente lo primero que aflore a los labios.

A cuenta de sinceridad no le diríamos a un amigo enfermo que se ve terrible y que sus probabilidades de morirse son altas. Tampoco llegaríamos al otro extremo de mencionarle que nunca se lo ha visto más radiante que ahora que está en el lecho del dolor. Eso sonaría a burla. Pero sí, buscaríamos una forma prudente de contarle los hechos, incluso dándole esperanza y consuelo; buscando aminorar el impacto.

En suma, la prudencia como hija de la sabiduría, puede marcar la diferencia entre fe o desesperanza; paz o guerra; vida o muerte.(WBC)

El que refrena su boca y su lengua
se libra de muchas angustias.
Proverbios 21:23.


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