Entradas

Mostrando las entradas de 2014

No encaja

Imagen
 Por: Luis Caccia Guerra escrito originalmente para www.devocionaldiario.com     Hay sitios y ámbitos en los que no sólo las personas que se hallan o concurren con cierta regularidad o frecuencia a ese lugar, sino que aún una silla perteneciente al mobiliario, uno la encuentra familiar; no tanto como de su propiedad, pero sí existe algún sentido de “pertenencia” o vínculo con cosas, edificios y personas. En cambio hay sitios en los que, sin importar causas, razones o circunstancias, a uno le queda más que en claro desde el principio, que no encaja. La sensación más clara y evidente es “yo no pertenezco aquí”. A menudo, no pertenecer, es triste, pesa. Si no tenemos bien en claro las verdaderas causas por las cuales no pertenecemos, puede inclusive, lesionar nuestra propia autoestima. Sobre todo si nuestros mejores esfuerzos están empeñados en pertenecer a ese grupo, lugar, institución. Pero a veces no deja de ser una gran tranquilidad de conciencia,

Una vez fui un jardín

Imagen
  Una vez, hace muchos años, fui un jardín florido. De esos llenos de rosas y de agradable fragancia ante el Señor. Es que una vez esa semilla de su Palabra había caído en buena tierra y germinó. Era esa semilla de Su Palabra en mi corazón contrito y humillado delante del Señor. Fui un niño creyente, pero los golpes de la vida, las carencias, las ausencias, los desengaños, las mentiras de quienes me rodearon y en quienes confié endurecieron ese corazoncito y finalmente me convertí en un joven ateo, de esos que no querían saber nada con Dios ni con nada que tuviera que ver con El. Un día me ví a mis jóvenes 18 años, sin proyectos de vida y en medio de una terrible depresión. Ya no había vida más allá para mí y la posibilidad de quitarme la vida ya había comenzado a cobrar fuerza. Fue entonces cuando a mediados de octubre de 1980, la luz de Cristo me alumbró, con lágrimas en los ojos, con un corazón contrito y humillado, y después de una terrible lucha, finalmente entregaba mi a

En medio de la tormenta

Imagen
Por: Luis Caccia Guerra para www.devocionaldiario.com Me fascina el relato de finales del cap. 14 del Evangelio de Mateo.   Mientras Jesús había subido al monte a orar, los discípulos salieron en una barca con destino a la otra orilla del lago. El milagro que dio la nota esa tarde había sido la alimentación de los cinco mil. Los discípulos habían hallado en Jesús, no sólo a un líder formidable que les traía palabras de otro mundo, del Reino de los Cielos; sino también a uno que estaba en condiciones de dar satisfacción abundante a sus necesidades. Pero las sorpresas para ellos, recién comenzaban.   Hoy descubrirían que además de sus palabras y capacidad de proveerles, también tenía poder para protegerles sin importar personas ni circunstancias. A la cuarta vigilia de la noche, esto es entre las tres y las seis de la mañana, estaban ya en el medio del lago con destino hacia la otra rivera. En la Biblia, generalmente se utiliza la palabra “mar” para referirse a

Mi consuelo y fortaleza

Imagen
Por: Luis Caccia Guerra para: mensajesdeanimo.com Hace un tiempo, me encontré con un amigo que hacía mucho no veía. Pero además de ello, había distancia entre nosotros. Circunstancias, desentendimientos habían puesto un abismo entre lo que durante muchos años, tantos, que es la mayor parte de nuestras vidas, había sido una profunda amistad. Lo que menos esperaba era hallarlo en ese lugar y a esa hora. Por otra parte, yo también había salido de trabajar a una hora poco común para mí… es decir, toda una cadena de circunstancias hizo que el encuentro se concretara. No podía haber sido de otra manera.   El esperaba a su hijo menor, que nunca apareció. Estaba angustiado, no había manera de comunicarse con él, y su propio teléfono se había quedado sin batería. Es justamente en ese momento, cuando sin tener idea de lo que estaba pasando, hice mi aparición en escena. Le facilité mi teléfono nuevo, que hacía un par de semanas había adquirido justamente con fines de servici