DERRIBADO, PERO NO DESTRUIDO

Brendaliz Avilés
Escritos del Silencio
Staff


Cuando digo derribado pero no destruido, quiero decir que podemos estar pasando un momento de decepción, dolor, tristeza o prueba, pero que debemos entender que  aquello  no será permanente; que en algún momento cambiará, pasará.

Derribado significa además que puede que ahora estemos en el suelo,  porque el combate ha sido fuerte y nos hemos agotado; pero que inclusive allí, no hemos perdido la batalla. Aún tenemos la opción de sorprendentemente triunfar, pues en medio de nuestras debilidades e insuficiencias, el Señor se  glorificará y nos mostrará Su poder.

Yo soy derivada porque provengo de Dios. Él es mi creador y mi padre. Su corazón late en el mío, por tanto seguiré adelante.

Tú eres derivado cuando te encaminas a hacerle la guerra a la tristeza, con esa seguridad esperanzadora que te lleva de la mano a confiar que    vienen días mejores para ti, para tu causa.

Amig@ que me lees :

Aunque hayas recibido fuertes impactos en tus luchas, sigue con tu armadura puesta; eres un guerrer@, y como tal tienes que batallar, sin permitirle al  temor imponerse sobre tu vida y tus sueños.

No te rindas ante ningún fracaso,  porque Dios tiene planificado algo mejor para ti. Tu presente, futuro y lo por venir está en Sus soberanas manos. Tu tiempo está sujeto al suyo. Él tiene el control de todo.

Que esta palabra de aliento ilumine tu camino.

Ya que has puesto al Señor por tu refugio,
    al Altísimo por tu protección,
ningún mal habrá de sobrevenirte,
    ninguna calamidad llegará a tu hogar.

Salmo 91:9,10

 

¿Estás cargado?

Encuéntranos también en:

Comentarios

Entradas más populares de este blog

UNGES MI CABEZA CON ACEITE...

El poder del ayuno

PARECIDOS, PERO NO IGUALES