EL SUBIBAJA DE LAS EMOCIONES
Daniel Gaydou
DEVOCIONALES CORTOS DIARIOS BIBLICOS
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Deuteronomio
28:47-48
Alguien dijo por ahí: “la plata es lo importante, la salud va y viene”.
Está dicha al revés de cómo debería ser. Pero habla de algo que es muy importante para nosotros los seres humanos, las simples personas, los últimos orejones del tarro. Y es que especialmente nuestras emociones, nuestros estados emocionales. No es por casualidad que se le llama “estados”. a una publicación donde uno cuenta algo puntual de un día, en algunas redes sociales. Es porque los seres humanos tenemos eso de la plata va y viene, porque las emociones nuestras van y vienen. Somos como que estuviéramos en una montaña rusa y de repente estamos como locos gritando y todo, y de repente estamos respirando aliviados; para después volver otra vez a gritar como locos y después terminar otra vez respirando aliviados y así.
Especialmente la vida de algunas personas donde las circunstancias se suman a eso. El tema es que nosotros somos de cierta forma, como víctimas del oleaje. Y en eso ha afectado mucho la pandemia ¿eh? Por eso tenemos todos los días estos Tips. Ya le perdí la cuenta, no me voy a poner a calcular cuántos han sido hasta ahora, pero son más de 500 porque ya celebramos los 500. Y el punto es que la pandemia lo que ha logrado, es ser un factor colectivo muy profundo de desánimo, de cansancio. Así que un montón de gente planea irse del país y otros planean renegar de todo y sí bueno esto es todo mentira, es un invento, y qué sé yo. Y no se cuidan y contribuyen así a la que es justamente la misma causa que produce tanto desastre. Y en la angustia real de seres queridos que han partido y que nos han golpeado y nos ha dolido. Y entonces uno no es impermeable a eso.
El ser humano no es impermeable. Pero lo que quería decir es, esas sierras que nosotros tenemos donde hay picos y valles, subidas y bajadas, altitud y profundidades, afectan nuestra vida espiritual, que de por sí es así; pero que hay cierto “campo de maniobra”.
Está en la biblia. Yo admiro la Biblia. ¿Sabé lo que hice hoy? Te cuento: Porque muchos me preguntan ¿cómo hacés con los devocionales todos los días? ¿Cómo hacés para tener todos los días alguna idea? Mirá, algunos días no tengo idea. Yo también soy uno que tiene altibajos. Y la cosa que yo hago es, busco en la Biblia; porque hay cosas que están dichas, que uno las lee así al pasar y dice: “¡Mirá vos qué cosa! Pensar que hace tantos años dijeron eso”. Pero si vos lo leés más en detenimiento, parás un poquito y te fijás, te encontrás con profundas verdades existenciales. Porque finalmente eso es la Biblia ¿no? Es un Libro de la Vida. Y el problema es que no es el libro de la vida de mucha gente. Porque cuando hablan de la Biblia piensan en un libro viejo, más viejo que la Constitución. Y no leés la constitución tampoco, porque es un libro viejo. Y tampoco leés la Biblia porque es un libro viejo. Y no se dan cuenta que la Biblia es un libro nuevo. Es un libro nuevo cada día. Es un libro que se escribe todos los días. Y entonces el mismo texto que vos leés, que alguien leyó hace mil años, vos lo leés hoy y vas a ver que es un texto nuevo, es una novedad para tu vida, para mi vida. Como Deuteronomio 28:47, que voy a leer hoy.
Que lo busqué buscando la palabra “entusiasmo” y a ver cuál es la más antigua aparición en la Biblia. En Éxodo está la primera aparición de “entusiasmo”. Pero, ¿sabés cuál era el entusiasmo? Cuando Moisés se fue a buscar las leyes, las tablas de la ley, el pueblo edificó un becerro de oro. Y dice que Aaron, que había quedado medio a cargo ahí de la tribu, dice que al ver el entusiasmo del pueblo, organizó ahí un altar, para hacer una fiesta al estilo de las refieras paganas de la antigüedad. ¡Mirá vos cómo el entusiasmo, fue un entusiasmo para hacer macanas. Mientras que Moisés estaba siendo lo más trascendente que pasó en el pueblo de Israel en toda su existencia, sacando la muerte de Cristo en la cruz. Que fue la dación de la Ley en Moisés. Mientras Moisés estaba buscando a Dios en la montaña ,el pueblo estaba buscando la joda en la llanura. Y digo “joda” con toda conciencia, porque es la palabra mejor para traducir la palabra que usa la Biblia para referirse a lo que ellos hicieron. Que era una fiesta de adoración al becerro, donde era un tipo “vale todo” y la pasamos fenómeno, y no nos privamos de nada. Y eso es lo que hizo el pueblo de Israel.
Mirá esa paradoja.
Moisés en la montaña cerca de Dios; el pueblo en la llanura cerca del entusiasmo
vano, pasajero, mundano; que ofrece la cotidianeidad.
Si no sirves al SEÑOR tu Dios con alegría y entusiasmo por la gran cantidad de beneficios que has recibido, servirás a los enemigos que el SEÑOR enviará contra ti. Pasarás hambre y sed, andarás desnudo y carente de todo. El SEÑOR te pondrá sobre el cuello un yugo de hierro que te oprimirá severamente hasta destruirte.
(Deuteronomio
28:47-48 NTV)
Es así de fácil. Deuteronomio 28:47 y 48. Es así de fácil. Una persona no sirve a Dios, no lo adora con entusiasmo, no tiene entusiasmo de Dios. Dice: “Sí, yo creo en Dios, pero bueno, listo ya. Tengo muchos problemas para andar dedicando tiempo a eso, a la religión”. Si tiene esa actitud, es esclava automáticamente, lo dice acá ¿eh?, “servirás a los enemigos que el Señor enviará contra ti”. Automáticamente una persona que no le da el primer lugar en su entusiasmo a Dios, es esclavo de otras cosas. Mucha gente dice, no, la verdad a mí eso de la religión…” ¿Sabé lo que está diciendo? “La religión no, pero a otras cosas sí” Por ejemplo, a este pensamiento presuntamente liberal y librepensador: “Yo creo que debe existir Dios, pero no me complico con nada. Yo creo en el Dios que está en la naturaleza, así y todo, ¡y listo!” ¿Sabés lo que te está diciendo? “No creo en el Dios de la Biblia. Pero estoy creyendo en esta fe que tengo, profunda y que voy a defender a muerte; que es yo pienso lo que quiero y hago lo que quiero”
Escuchame: ¿Vos te creés que eso es una idea novedosa? ¿Que es de este siglo pasado? ¡No! Es muy antigua. Mirá, en el Inferno, del Dante, dice eso. Dice que las buenas obras de las personas están tapizando la entrada al Infierno. Porque automáticamente se produce esto. ¿Vos tenés entusiasmo por Dios? Vas a estar contento y feliz recordando todas las cosas que Dios es en tu vida, como un beneficio. Y este es un beneficio. Y vos te olvidás, y decís: “Nada, estoy medio decepcionado yo con la Iglesia. La verdad estoy decepcionado. Y conocí ahí un chanta. La verdad, yo me quedo más vale en mi casa y adoro, hago mis cosas…” Y eso te está esclavizando. Y esa esclavitud ¿a dónde te va a llevar? ¿A las alturas espirituales? No. Te va a llevar al desastre.
Así que hay una alternativa siempre en esto. No, qué circunstancias tengo; porque las circunstancias nuestras no las podemos manejar. Pero sí podemos manejar cómo nosotros nos vamos a relacionar con Dios en medio de nuestras propias circunstancias.
¡Bendiciones! ¡Que tengas un lindo día!
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