Dice lo que piensa pero ¿Piensa lo que dice?

Alex López
La Catapulta
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“Pero yo les digo que en el día del juicio todos tendrán que dar cuenta de toda palabra ociosa que hayan pronunciado. Porque por tus palabras se te declarará inocente y por tus palabras se te condenará».” La Biblia en Mateo 12:36 y 37

“El que mucho habla, mucho yerra; el que es sabio refrena su lengua.” Proverbios 10:19

“Al que le gusta pecar, le gusta pelear; el que abre mucho la boca busca que se la rompan” Proverbios 17:19

“Eviten toda conversación obscena. Por el contrario, que sus palabras contribuyan a la necesaria edificación y sean de bendición para quienes escuchan. No agravien al Espíritu Santo de Dios con el que fueron sellados para el día de la redención.” Efesios 4:29 y 30

“Mis queridos hermanos, tengan presente esto: Todos deben estar listos para escuchar, pero no apresurarse para hablar ni para enojarse; pues el enojo de una persona no produce la vida justa que Dios quiere.” Santiago 1:19 y 20

Estos pasajes vinieron a mi mente cuando esta semana escuché la siguiente frase y no recuerdo dónde. Pero esta decía: “Dice lo que piensa pero ¿Piensa lo que dice?”

Daremos cuenta de toda palabra. Las palabras nos meten en problemas o nos libran de ellos.

Nuestra boca saca lo que metemos al corazón. El corazón representa nuestros sentimientos, nuestros pensamientos y nuestra voluntad. Y, esta es dirigida por lo que metemos.

¿Qué está metiendo a su corazón por medio de lo que mira, escucha y medita?

Existe un tentador, pero está limitado al tiempo y al espacio. Nosotros mismos nos tentamos cuando nos dejamos llevar por nuestros propios malos deseos.

¿Qué puede hacer para meter en su corazón lo que es bueno, agradable y perfecto?

¿Qué puede hacer para meditar en lo que es excelente o merece elogio y tener así sentimientos y pensamientos que son excelente y merecen elogio?

¿Cómo puede rendir sus pensamientos, sentimientos y voluntad a Dios?

¿Qué pasará este día si pasa consciente de qué y cómo habla? Y sobre ¿Qué medita y qué produce en usted?

“Con respecto a la vida que antes llevaban, se les enseñó que debían quitarse el ropaje de la vieja naturaleza, la cual está corrompida por los deseos engañosos; ser renovados en la actitud de su mente; 24 y ponerse el ropaje de la nueva naturaleza, creada a imagen de Dios, en verdadera justicia y santidad.” Efesios 4:22-24

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