Un sueño lo comienza todo, pero sólo este ingrediente lo materializa

Por: Alex López
Ministerio La Catapulta
http://lacatapulta.net/vidacristiana/
Publicado con permiso


Dicen que soñar es gratis y qué gran verdad. Pero soñar, no es suficiente.

Al mundo no le faltan soñadores. Pregúntele a cualquiera ¿Qué le gustaría llegar a tener en la vida? Inmediatamente va a recibir una descripción de un cuadro futuro tan especial.

¿Cuál es su sueño? Ya sea que esté enfocado en el área espiritual, física, financiera, social o familiar. Todo comienza con describir vívidamente lo que queremos.

Mi sueño es graduarme de la universidad y optar a tal puesto.
Mi sueño es juntar el capital necesario para poner tal negocio.
Mi sueño es leer la Biblia de pasta a pasta.
Mi sueño es hacer ejercicio cinco días por semana.

¿Qué sueños tiene usted? Muy pocas personas no tienen sueños bien definidos. Si usted es de esas personas, deténgase por un instante. Y dedíquele unos minutos a definir sus sueños. Piense que ya ha llegado a lo que quiere y escríbalo.

Al mundo no le faltan soñadores, le faltan realizadores de sueños. Al mundo no le faltan arquitectos de sueños, le faltan albañiles de sueños. Una vez definido un sueño, hay que trabajar en él.

Trabajar en un sueño, consiste en definir primero los pasos para llegar a él. Si el sueño es el segundo nivel de una casa, las gradas se convierten en los pasos para llegar a él. ¿Cuáles son las gradas que necesita construir para materializar su sueño?

Si el sueño es un destino. Lo que necesita entonces es definir el recorrido. Y luego caminar diariamente sobre la ruta definida. Realizar un sueño es algo simple, pero no fácil. Simple cuando nuestras manos van a donde nuestra boca dijo que iría, cuando nuestras manos lo que realmente quieren, es estar inactivas y pasivas.

Un sueño lo comienza todo, pero sólo la acción diaria, disciplinada y apasionada para materializarlo, incluso en varias décadas en el futuro, terminarán por crear la realidad que un día fue soñada.

Muchos dirán al ver su logro, fue suerte. Pero usted sabe, que verdaderamente fue el resultado de un esfuerzo continuado a lo largo del tiempo.

¿Qué hará diferente a partir de hoy? Esfuércese y sueñe. Pero no caiga en el pecado en el que cayeron aquellos comerciantes a quienes les habló Santiago. Quienes soñaron con un futuro, pero un futuro que no incluyó a Dios en sus vidas. Y cualquier futuro soñado sin Dios, sólo se convertirá en una pesadilla y una pesadilla eterna.


“Ahora escuchen esto, ustedes que dicen: «Hoy o mañana iremos a tal o cual ciudad, pasaremos allí un año, haremos negocios y ganaremos dinero». 14 ¡Y eso que ni siquiera saben qué sucederá mañana! ¿Qué es su vida? Ustedes son como la niebla, que aparece por un momento y luego se desvanece. 15 Más bien, debieran decir: «Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello». 16 Pero ahora se jactan en sus fanfarronerías. Toda esta jactancia es mala. 17 Así que comete pecado todo el que sabe hacer el bien y no lo hace.” La Biblia en Santiago 4:13-17


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