David Wilkerson Teología Sana https://teologiasana.com/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso ¿Quién te dice que eres indigno, bueno para nada, inútil, inservible para Dios ? ¿Quién te sigue recordando que eres débil, impotente, un fracaso total? ¿Quién te dice que nunca llegarás a la medida de Dios? ¿Quién les dice a los miembros del equipo de adoración que no son dignos de cantar alabanzas en la casa de Dios o a los músicos que no son dignos de tocar instrumentos durante la adoración? ¿Quién les dice a los ujieres, ancianos, maestros de la escuela dominical, voluntarios, personas en las bancas que son indignos? Esto no es ningún misterio, todos sabemos de dónde viene esta voz: del mismo diablo. Él quiere que vivas convencido de que Dios está enojado contigo. El diablo, el acusador de los hermanos, te hace recordar cada uno de tus pecados y fallas. Él te dice: “Dios no puede usarte hasta que pongas las cosas en orden y te sientas digno”...