Somos realmente libres o esclavos?

Alex López
La Catapulta
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Hoy celebramos en Guatemala 190 años de independencia de España (15/09/2011-NdE). Pero ¿Seremos realmente libres o esclavos?

Usted dirá qué le pasa a este hombre. ¿Cómo se atreve a preguntarme si soy esclavo o libre? Créame, el concepto bíblico de libertad y de esclavitud es muy distinto al que conocemos y manejamos en nuestro tiempo.

La Biblia dice: “¿Acaso no saben ustedes que, cuando se entregan a alguien para obedecerlo, son esclavos de aquel a quien obedecen? Claro que lo son, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia.” Romanos 6:16-18 NVI

De este pasaje bíblico concluyo:

1. Todo el mundo es esclavo de lo que obedece
Dios enseña: “Usted es esclavo de lo que decide obedecer”. Porque tome nota, el esclavo siempre obedece. No cuestiona, sólo obedece. Vive en modo de: “Aquí estoy para lo que usted ordene”. Es entonces usted ¿Libre o esclavo?

Evalúese:
¿Puede vivir sin obedecer a la mentira en el colegio, en la U. o en el trabajo?
¿Puede vivir sin obedecer a la corrupción en el gobierno o en la iniciativa privada?
¿Puede vivir sin obedecer al alcohol cada fin de semana?
¿Puede vivir sin obedecer a las tentaciones sexuales en Internet o en persona?
¿Puede vivir sin obedecer a las malas expresiones cuando se expresa?
¿Puede vivir sin obedecer al odio y resentimiento que tiene por la ofensa?

En pleno siglo XXI existen más esclavos que en cualquier época. Personas que son esclavos de lo que obedecen y ni siquiera se han dado cuenta. Hijos que son esclavos de la rebeldía y la falta de respeto hacia sus padres. Padres que son esclavos del trabajo. Madres que son esclavas del chisme. Personas que son esclavas del alcohol al punto que sí él no está en sus reuniones sociales, no hay alegría. Personas que son esclavas de las relaciones sexuales antes del matrimonio y fuera del matrimonio. Personas que son esclavas del falso testimonio y hablan sin fundamento alguno sobre cualquiera porque de una fuente muy cercana me enteré que. Personas que son esclavas del “Así soy yo”. Este es mi carácter y si quieren bueno. Personas que son esclavas del egocentrismo “No se metan conmigo y no me meto con nadie”. Al final de cuentas la Biblia enseña que somos esclavos de lo que obedecemos. ¿Es usted esclavo o libre? ¿A quién obedece?

2. Sólo podemos elegir entre ser esclavos de la obediencia a Dios o de la desobediencia a él
Dios enseña “Usted sólo tiene dos alternativas, la obediencia o el pecado”. Créame Dios no dejó los mandamientos para evitarle vivir, sino para evitarle sufrir. Dios no dijo: “No robarás” para que usted viviera intranquilo con su celular en la calle sino todo lo contrario. No dijo: “No matarás” para que estuviera triste porque moriría sólo por una enfermedad o causas naturales. No dijo: “No codiciarás” para que viviera intranquilo por lo que otros tienen. No dijo: “No cometerás adulterio” para viviera mal con su pareja. Todo lo que Dios dice en la Biblia es para evitarnos sufrir y permitirnos vivir su plan perfecto.

En cuanto a la libertad en esta vida sólo existen dos opciones: obedecer o desobedecer a Dios. Vivir una vida justa o una vida injusta. Hacer lo que se debe o hacer lo que se quiere.

¡En otras palabras todos somos esclavos! Porque si somos esclavos de lo que obedecemos, siempre seremos esclavos de algo. Pero ¿Qué mejor que ser esclavo de la justicia y de la obediencia a Dios? Y nada peor que ser esclavo del pecado – que es hacer todo aquello que Dios dijo No, no para evitarnos vivir sino para evitarnos sufrir –.

Si va a ser esclavo de alguien, sea esclavo de la obediencia a Dios.

3. Toda esclavitud tiene consecuencias
Cuando se habla de temas como el de los mandamientos, pues a casi nadie le gustan las reglas – aunque que ya vimos que no son reglas ridículas sino que tienen el propósito de darnos paz, salud al cuerpo y que son para nuestro bien – muchas veces escucho esta frase “Yo soy libre de hacer lo que quiero”. Es una así como cállese y deje de hablarme de esto por favor.

Sí, tienen razón. Cada quien es libre de hacer lo que quiere. Dios nos dio el libre albedrío que es obrar por reflexión y elección. Usted no es una animal que responde a los estímulos. Usted primero piensa, reflexiona y luego actúa. ¡Usted como ser humano tiene la capacidad de pensar sobre cómo pensar! Pero usted no puede elegir hacer lo que quiere, el libre albedrío significa que sólo puede elegir entre dos opciones: obedecer a Dios o desobedecer a Dios. Ser amigo de Dios o ser enemigo de Dios. Ser luz o ser oscuridad. ¡No existen otras opciones!

Sí, tienen razón. Cada quien es libre de hacer lo que quiere, pero jamás es libre de escoger las consecuencias que quiere. Usted puede elegir lo que quiere pero las consecuencias van en el combo. Usted puede escoger pegarle en la cara a alguien en la calle, pero no se libra de las consecuencias de irse preso si la persona le muestra a la policía el golpe y llega donde está usted con ellos. Usted puede escoger lanzarse del segundo nivel de su casa, pero no puede evitar la consecuencia de caer y de quebrarse las piernas o hasta matarse.

Es cierto somos libres de escoger lo que queramos pero sin poder alguno en escoger nuestras consecuencias. Para Dios la obediencia trae como fruto la justicia, la paz y la vida eterna. Pero la desobediencia trae como fruto la injusticia y ultimadamente la muerte. No sólo la muerte física sino la eterna, la separación eterna en el más allá de Dios por completo y un tormento eterno en un lugar que todos conocemos su nombre y por eso cuando pasa algo tan terrible y duro de aceptar decimos “esto es un infierno”.

Entonces es ¿Libre o esclavo? Simple y sencillamente respóndase ¿A qué estoy obedeciendo? Usted es esclavo de ello. Por eso le animo a que sea esclavo de la obediencia a Dios y libre de esclavitud al pecado. Si ya asiste a una iglesia y lee y practica la Biblia todos los días sígalo haciendo, si no, créame es tiempo de empezar a hacerlo y de descubrir la experiencia real para lo que Dios lo envió a este mundo, que dicho sea de paso, no es casualidad.

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