PALABRAS DE AFIRMACIÓN

Alex López
La Catapulta
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Escuche estas palabras de afirmación para un hijo: “Tan pronto como Jesús fue bautizado, subió del agua. En ese momento se abrió el cielo, y él vio al Espíritu de Dios bajar como una paloma y posarse sobre él. Y una voz del cielo decía: «Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él».” Marcos 3:16 y 17

Muchas veces, como figuras de autoridad (padres, jefes, líderes o maestros), nos dedicamos a enseñar, a exigir y a señalar lo que debe ser corregido. Pero pocas veces señalamos lo bueno que las personas hace o el potencial que tienen.

Algunos piensan, si a mí nadie me afirmó ni me felicitó en nada, ¿Por qué debo hacerlo con otros? Jesús mismo recibió palabras de afirmación del cielo: “Este es mi Hijo amado; estoy muy complacido con él.”

A partir de hoy, propóngase ser la figura de autoridad que debe ser, pero no sólo para señalar lo malo. Esto al final de cuentas, es lo único que el acusador sabe hacer.

Por supuesto que debemos corregir, en privado, con amor y sin humillar al otro. Pero además de corregir, propóngase también afirmar, felicitar, abrazar y bendecir.

Le aseguro, que el rostro de los demás, con un cumplido genuino, con una palabra de afirmación genuina, transformará el corazón, el día y tal vez la vida, de alguien más.

Un amigo llorando me decía: mi papá nunca me dijo nada. Pero siempre habló bien de mí con otros. Este es el equivalente de ser frío y crítico con la pareja y hablarles a todos de sus bondades.

Y qué mayor afirmación de Dios para nosotros que esta: “¡Fíjense qué gran amor nos ha dado el Padre, que se nos llame hijos de Dios! ¡Y lo somos! El mundo no nos conoce, precisamente porque no lo conoció a él.” 1 de Juan 3:1 Afirmar, es amar… Amar, sin afirmar, es valorar en secreto. Y, lo secreto, jamás se conoce…

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