Enseñanzas no bíblicas sobre la guerra espiritual

Alex López
La Catapulta
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Tan sólo escuchar la frase «guerra espiritual» y ya muchos se asustan. Pronto piensan en demonios (dicho sea de paso el que ha visto a una persona endemoniada, jamás dejaría que sus hijos se disfrazarán de los poderes de las tinieblas y participaran de Halloween). Otros se asustan porque tan sólo mencionar «guerra espiritual» y se imaginan muchas enseñanzas extrañas y no bíblicas y se dicen para sus adentros «aquí viene de nuevo». Tanto se dice y se practica sobre la guerra espiritual que muchos cristianos no tienen idea de qué es o en qué consiste la misma y por lo tanto lo que oyen (tome nota, no lo que leen en la Biblia, sino lo que oyen o leen en un libro) creen y lo que es peor, sin confirmar siquiera si es bíblico, lo practican.

Existen enseñanzas y prácticas no bíblicas sobre la guerra espiritual sobre las que regularmente me consultan. Le comparto algunas de las que he visto o me han consultado. Ya sea ungiendo con aceite las paredes de las casas (cuando la Biblia enseña en el Nuevo Testamento que sólo debemos ungir con aceite a los enfermos), dando 7 vueltas alrededor de algo o alquien mientras se ora (cuando no fueron 7 vueltas las que Israel dio a la ciudad de Jericó previo a conquistarla y que Dios derribara sus muros, sino un total de 13 vueltas. 1 vuelta cada día durante 6 días y el 7mo día dieron 7 vueltas), dibujando mapas territoriales con los demonios por región para conocer contra quién pelear (la Biblia sí dice que tenemos lucha contra principados y potestades en el cielo, pero todo mapa territorial que existe y fue elaborado por alguien no aparece en la Biblia y jamás puede ser doctrina), organizando reuniones para orar y expulsar a los demonios para siempre de un territorio o ciudad (cuando claramente Dios dice en su palabra que el diablo es el príncipe de este mundo y tiene permiso para operar en él hasta el fin, por supuesto que sí podemos echar fuera a los demonios de las personas pero no de la tierra, esto lo hará Dios cuando los envíe tanto al diablo, demonios y pecadores no arrepentidos, al lago de fuego), hablar con los demonios para que sean ellos los que indiquen cómo entraron al cuerpo de una persona para identificar la debilidad del poseído o cuántos demonios tiene (se les habla a los demonios y se les entrevista, cuando los demonios son unos grandes mentirosos y su padre es el diablo! Si no se sujetaron sino que se rebelaron contra Dios junto con Satanás, ¿Cómo le dirán la verdad ahora y además el cómo evitar que la persona sea poseída de nuevo al decirle cómo tomaron posesión de ella o qué puertas abrió? o ¿Qué importa cuántos demonios existan en la persona, no es el nombre de Jesús poderoso para expulsar a todos y no se hace necesario saber cuántos hay?) o basando la doctrina de la guerra espiritual sacando pasajes bíblicos fuera de contexto o basando sus eñseñanzas en la experiencia.

No peleamos directamente contra el diablo, sino contra lo que el diablo quiere, almas.

Permítame compartirle lo que yo encuentro en la Biblia sobre la guerra espiritual (encuentra los textos bíblicos en los que baso mis conclusiones al final de la publicación):

1. La guerra espiritual sí existe.
Es una guerra entre Dios y el diablo. El reino de la luz y el reino de las tinieblas. Dios y los ángeles y el diablo y sus demonios.

2. Esta ya fue ganada por Jesús en la cruz, pero existirá hasta el fin de los tiempos.
¿Quién ganó la guerra entre Estados Unidos e Irak? ¿Se acabaron los disparos y las bombas? No, porque aunque el enemigo haya sido derrotado, sigue operando. Dice la escritura que el diablo es el príncipe y el dios de este mundo y todavía tiene permiso para seguir operando en la tierra y busca alejar a los seres humanos de Dios e impedir que se arrepientan de sus pecados y lleven una nueva vida, la vida plena que Dios planeó para la humanidad.

3. El diablo sólo está dando patadas de ahogado para llevarse en su derrota a cuántos pueda.
El diablo ya fue derrotado en la cruz del calvario y no conforme desea llevarse con él al lago de fuego a cuantas personas logre seducir para que no obedezcan la voluntad perfecta de Dios. Mientras más personas mueran sin ser hijos de Dios, siente que tiene una derrota pero con sabor a victoria. Fue derrotado pero busca lastimar al Reino de Dios al llevarse los que fueron creados para el bien y no encontraron el cómo hacerlo, porque muchos sin saberlo servían al dios de este mundo.

4. La guerra espiritual se pelea en lo individual.
La forma de pelearla en lo individual es orando, y viviendo en santidad. Orando para que a los que no creen en el evangelio, les sea quitado el velo que les impide ver la verdad y la luz y por lo tanto no se arrepienten de sus pecados. Y viviendo en santidad al permanecer cada uno de nosotros firmes en el evangelio sin ceder ante las seducciones del mal. Entonces viviremos en victoria y no en derrota, no le daremos gusto al diablo, ni a nuestros deseos pecaminosos.

5. La guerra espiritual se pelea en lo colectivo.
Esto se hace predicando para que otros entreguen sus vidas al Señor y sean libres del pecado. La causa de la guerra son las almas. Son ellas por las que podemos y debemos pelear. No peleamos directamente contra el diablo, sino contra lo que el diablo quiere, almas. Walmart y Kmart no se pelean entre ellos. Se pelean por los clientes. Nosotros peleamos por las almas que no conocen a Dios y por animar a permanecer en la fe a los que ya tenemos el privilegio de ser llamados hijos de Dios.

6. No podemos expulsar al diablo y a sus demonios de la tierra pero sí de la vida de toda persona
No nos confundamos, no podemos expulsar al diablo de la tierra. Eso le tocará a Dios en el tiempo que nadie más conoce, ni siquiera el hijo. Pero sí podemos expulsarlo de las vidas de nuestros parientes y amigos por medio de la oración, el ejemplo de una vida cristiana ejemplar y la predicación del evangelio. Y cuando nuestros parientes y amigos vienen a los pies de Cristo y se arrepienten de sus pecados, ganamos la batalla en lo colectivo uno a uno.

7. Le dejo algunas citas bíblicas para meditar sobre lo que la Biblia dice de la guerra espiritual:
Su enemigo el diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar”. 1 Pedro 5:8 NVI

“Antes de recibir esa circuncisión, ustedes estaban muertos en sus pecados. Sin embargo, Dios nos dio vida en unión con Cristo, al perdonarnos todos los pecados14 y anular la deuda que teníamos pendiente por los requisitos de la ley. Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz.15 Desarmó a los poderes y a las potestades, y por medio de Cristo los humilló en público al exhibirlos en su desfile triunfal.” Colosenses 2:13-15 NVI

“Ya me han oído decirles: “Me voy, pero vuelvo a ustedes.” Si me amaran, se alegrarían de que voy al Padre, porque el Padre es más grande que yo.29 Y les he dicho esto ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda, crean.30 Ya no hablaré más con ustedes, porque viene el príncipe de este mundo. Él no tiene ningún dominio sobre mí,31 pero el mundo tiene que saber que amo al Padre, y que hago exactamente lo que él me ha ordenado que haga.” Juan 14:28-31 NVI

Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.” 1 Pedro 5:8 NVI

El dios de este mundo ha cegado la mente de éstos incrédulos, para que no vean la luz del glorioso evangelio de Cristo, el cual es la imagen de Dios”. 2 Corintios 4:4 NVI


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