Río de Vida

David Wilkerson
Teología Sana
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La Palabra de Dios nos advierte: “¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?” (Hebreos 2:3). El precio a pagar por ignorar a Cristo es muy grande.

Ezequiel 47 habla acerca de un río de vida que sale del trono de Dios. Este río está formado por aguas santas y sanadoras; y mientras fluye a través del desierto, trae vida a todo lo que toca. Se hace más ancho y más profundo hasta que hay suficiente agua como para nadar en él.

«Estas aguas…descenderán a la llanura, y entrarán en la mar: y entradas en la mar, recibirán sanidad las aguas. Y será que toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos dos arroyos, vivirá: …» (Ezequiel 47:8-9)

Este río de vida representa el evangelio predicado y ha estado fluyendo desde el Calvario. Hoy en día, millones que escuchan y reciben la Palabra de Dios están siendo sanados y la verdad de Cristo les está despertando de su negligencia, pereza y apatía. Ahora sus ojos están bien abiertos y se deleitan en Jesús. Le buscan diariamente, aman su palabra, y comparten su intimidad con él.

¿Qué te ha pasado a ti? ¿Estás nadando en las aguas sanadoras de Dios? O, ¿has permitido que ese río fluya sin tocarte? Nota lo que pasa a las áreas del desierto en las que no llega el agua: «Sus pantanos y sus lagunas no se sanearán; quedarán para salinas.» (47:11)

A lo mejor eres culpable de ignorar a Jesús. No oras, eres desobediente, has descuidado su palabra y ahora tu descuido se ha convertido en tu estilo de vida. En verdad, has abortado toda la expectación que Jesús te producía.

¿Qué significa «quedarse para salinas», como menciona Ezequiel? Significa esterilidad total, improductividad, vacío, sequedad, soledad. Piensa en el Mar Muerto en Israel. Es un cuerpo de agua extremadamente salino. Ningún pez puede sobrevivir en él y ninguna planta puede crecer dentro de él o en sus alrededores. Es completamente estéril.

¿Te has convertido en ese tipo de pantano, una ciénaga seca y desolada? ¿Es tu vida estéril para producir fruto de Dios? ¿Es tu existencia diaria vacía, seca y solitaria? Otros alrededor tuyo están produciendo frutos y creciendo en Cristo, ellos han sido sanados por las aguas santas de Dios. Pero tú no posees ninguno de los recursos que ellos tienen y te has convertido en un cristiano de nombre nada más.

¡Nunca es demasiado tarde para comenzar de nuevo! Deja que el Señor haga de éste el primer día de un nuevo comienzo para ti.


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