Quiero ser Águila

Por: Jésica Andrea para www.larocaministerios.blogspot.com

Quiero ser águila cuando el viento me empuje hacia atrás,
Quiero ser águila cuando la lluvia caiga y moje mis fuerzas tratando de derribarme
Quiero ser águila cuando el invierno llegue, cáigala nieve y la temperatura baje a tal punto de que trate de congelarme
Quiero ser águila para cuando la desmotivación trate de derrumbar mi Fe
Quiero ser águila para cuando la tristeza invada mi corazón
Quiero ser águila para cuando la soledad trate de invadirme y adueñarse de mi
Quiero ser águila para cuando los días se vuelvan noches
Quiero ser águila para cuando la desesperación llegue
Quiero ser águila para cuando la tormenta llegue y arrase con todo
Quiero ser águila para cuando llegue la amargura quiera invadir mi espíritu
Quiero ser águila para cuando el vacío intente desterrar todo lo bueno de mí
Quiero ser águila para cuando el enemigo trate de herirme
Quiero ser águila para cuando el enemigo quiera destrozarme
Quiero ser águila, quiero tener alas de águila para alzar el vuelo lo más alto, dejando todo lo que el enemigo quiere hacer conmigo, pues yo estaré arriba y tu abajo
Porque aunque quiera ser águila y tal vez lo sea, volare alto; porque tú mi Dios estarás allí dándome el poder de tu espíritu, me levantarás me darás fuerzas para vencer al enemigo.
No tendré las mejores alas, porque tu las tienes, porque nada ni nadie es más que tú Señor, nadie tiene el amor inmenso e infinito que tu tienes para mi. Nada ni nadie tiene el poder que tu tienes.
Porque con tu mano levantas y curas al espíritu quebrantado,
A El alto y sublime que habita en la eternidad y su nombre es el Santo de Israel, al que reina por los siglos de los siglos, al que nos llama príncipes y princesas, porque somos sus hijos y el es nuestro rey. Al que venció la muerte, al enemigo, se levanto de entre los muertos y vivo está por toda la eternidad y por el tenemos vida eterna. Al que está en todas partes, no lo veo pero su presencia me hace sentirlo.
A Él lo elijo y acepto como mi maestro, quiero tú Señor lo seas, Quiero ser una buena alumna en esta vida, pues tu me has dado mucho más de lo que esperaba e imaginaba. Quiero convertirme en un águila.
Aquí en la tierra somos tus pichones y tu nuestro padre que bajo tus alas estamos protegidos del enemigo, queremos ser águilas como tú.
Qué lindo es ser un pichón e ir corriendo a ti Señor.
Tu gloria me ha alcanzado para alcanzar los sueños que tú tienes para mí.

pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
(Isaías 40:31 RV60)

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