UNA SALVACION TAN GRANDE

Una Salvación tan grande

Síntesis del mensaje compartido por Joaquín Ravanelli el 11/12/2016

IGLESIA CRISTIANA EVANGELICA “SIGUEME”

España 155 – Godoy Cruz – Mendoza – Argentina

Qué bueno ver a estas personas que toman la decisión de pasar por las aguas del bautismo y DECLARAR que han recibido a Cristo como su Salvador. Esta SALVACION en sí es un regalo de Dios. UNA SALVACION TAN GRANDE.

Pero me gustaría sintetizar, con respecto a la Salvación, en tres puntos:

1-La misión y el premio

2-Un paso de muerte a vida

3-Morando bajo la sombra del Omnipotente

1-LA MISION Y EL PREMIO.

CÓMO SE OBTUVO ESTA SALVACION TAN GRANDE.

Estas cosas habló Jesús, y levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti; como le has dado potestad sobre toda carne, para que dé vida eterna a todos los que le diste. Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado. Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese.

(Juan 17:1-4 RV60)

Desde niño me ha gustado leer historias de aventuras y hay un escritor que me gusta mucho y es Julio Verne. Me gusta ver como le pone atributos al protagonista. ¡Se lleva todas las fichas! Uno de que me llamó la atención es “Miguel Strogoff”. Le asigna una misión que solamente él la puede realizar. Él es el elegido para hacerla y nadie más la puede hacer.

En la Biblia hay un montón de historias que se asemejan a ésta. Había una misión que realizar y nadie más que ellos podían hacerla. En el libro de los Jueces de Israel, encontramos a varios. Después de la misión había un premio. La misión se cumplía, por más que su vida estuviera en riego y después de eso, Dios le otorgaba el premio.

Entre todas las historias que leí, HAY UNA SOLA imposible de hacer por nadie más, que por Jesucristo.

Y Él fue obediente. Dice la Biblia que Él se humilló y haciéndose obediente hasta la muerte y muerte de cruz…

y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

(Filipenses 2:8 RV60)

Me gusta esa parte del texto que leímos: “he acabado la obra que me diste que hiciese” (Juan 17:4).

Ahora bien: ¿Cuál es el premio?

Él había cumplido la misión. Tomó la misión sabiendo que finalmente iba a morir. Pero no nos olvidemos que esta misión tiene un premio:

LA VIDA ETERNA PARA TODA LA HUMANIDAD. ¡Qué premio! ¿No?

Y eso es justamente lo que hoy venimos a festejar. Hay personas que han decidido creer y aceptar esa Salvación. Y estoy muy emocionado porque en esta noche uno de ellos es mi hijo. Y otro de ellos es mi sobrino.

Estas personas están conscientes de que nadie les puede hacer un regalo tan grande. Ellos saben que han pasado de muerte a vida. Y con ello, vamos al segundo punto:

2-UN PASO DE MUERTE A VIDA

Ya hemos visto la Gran Misión de Jesucristo, que el único que podía hacerla era Él, y el Premio: LA VIDA ETERNA. Y vamos a ver esto de “muerte a vida”.

Cómo veía Jesús a la humanidad. Vamos a verlo no en mis palabras, sino en una palabra que está escrita en la Bibia.

Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.

(Mateo 9:36 RV60)

¿Cuál era el estado del hombre según Jesús?

Otro de sus discípulos le dijo: Señor, permíteme que vaya primero y entierre a mi padre. Jesús le dijo: Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos.

(Mateo 8:21-22 RV60)

Y se lo dijo a una persona que estaba al lado ¡que estaba viva! ¿Cómo es eso?

Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,

(Efesios 2:1 RV60)

Cuando decimos que pasan de muerte a vida, vamos a verlo un poco mejor:

La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un valle que estaba lleno de huesos. Y me hizo pasar cerca de ellos por todo en derredor; y he aquí que eran muchísimos sobre la faz del campo, y por cierto secos en gran manera. Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes. Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos secos, oíd palabra de Jehová. Así ha dicho Jehová el Señor a estos huesos: He aquí, yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis. Y pondré tendones sobre vosotros, y haré subir sobre vosotros carne, y os cubriré de piel, y pondré en vosotros espíritu, y viviréis; y sabréis que yo soy Jehová. Profeticé, pues, como me fue mandado; y hubo un ruido mientras yo profetizaba, y he aquí un temblor; y los huesos se juntaron cada hueso con su hueso. Y miré, y he aquí tendones sobre ellos, y la carne subió, y la piel cubrió por encima de ellos; pero no había en ellos espíritu. Y me dijo: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Así ha dicho Jehová el Señor: Espíritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo.

(Ezequiel 37:1-10 RV60)

Esta es una de las profecías de Ezequiel que más me ha llamado la atención. Fue escrita en el 580 A.C. más o menos. Es decir que hace unos 2.600 años que se escribió y describe muy bien la condición espiritual del mundo. Salgamos a la calle, ¿cuántos huesos secos encontramos? Los que viajamos a veces nos encontramos con aglomeraciones de personas. Todas corriendo de acá para allá sin Cristo, fríos, espiritualmente MUERTOS. Huesos secos.

Cuando Jesús miraba las multitudes se entristecía y aparte de eso decía “dejen que los muertos entierren a sus muertos”. El mundo está lleno de huesos secos.

¿Qué dice la Palabra? “Todos estamos destituidos de la Gloria de Dios” (Romanos 3:23) ¡TODOS!

Veo en este texto cinco puntos. Y dentro de esos cinco puntos en Ezequiel 37, hay una primera parte. Lo primero que veo acá es que Ezequiel tuvo una gran misión. No puso excusas, sino que se entregó. Dijo: “HEME AQUÍ”.

Muchas veces, Dios nos envía a algunos lugares que no son muy lindos. Huesos secos. Veamos al mundo como Cristo lo vio y dejémonos guiar por eso. Dios lo hizo pasar a Ezequiel por en medio de los huesos. Pensemos en esto: Jesús ¿dónde se metió, con quién estaba? ¿Qué le criticaban a Jesús? Justamente con qué clase de gente se juntaba.

Cuando voy a la gente, trato de evitarlos, o trato de hablarles cara a cara, directamente.

Dios quiere utilizarnos para hablarles a todas las personas que se encuentran como esos huesos secos, que no tienen esperanza, en el amor, el perdón, la misericordia de Dios, EL PREMIO, LA VIDA ETERNA. Si hoy festejamos los bautismos, es porque alguien se acercó, no trató de evitarlos, habló con ellos.

“Y me dijo: Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos? Y dije: Señor Jehová, tú lo sabes” (Ezequiel 37:3). Me hace acordar a Jesús cuando le pregunta a Pedro “¿me amas?” “Señor, tú lo sabes, responde Pedro” (Juan 21:37). Dios estaba probando la fe de Ezequiel.

A veces cuando uno habla a la gente parece que no escuchara. Huesos secos. Ezequiel podría haber pensado lo mismo. Ezequiel confió en el poder de Dios. Cuando nos dirigimos a las personas, es lo mismo. ¿Qué dice Hebreos 11:6?

Pero sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6 RV60)

Justamente Dios se especializa en esto. Si nosotros pensamos que va a ser imposible hablarle a alguien, que no m escucha, que no le interesa… Huesos secos. Dios es especialista en imposibles. Es necesario que tengamos fe en nuestra vida cristiana, porque sin fe es imposible agradar a Dios.

Hablar con autoridad. Ezequiel se paró entre los huesos secos y dijo como Dios le había ordenado: “huesos secos, levántense”, lo hizo con autoridad, con la AUTORIDAD DE DIOS. Nosotros tenemos al Espíritu Santo y no nos damos cuenta de que tenemos en El la Autoridad de Dios. Cuando hablamos de Dios tomamos esa autoridad que viene de El para hablar.

Y por último: La Palabra de El se cumple y los muertos vivirán. La palabra de Dios es poder.

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.

(Hebreos 4:12 RV60)

¡Fíjense si no tenemos autoridad! Dios es quien toca los corazones, no nosotros.

En Hechos 2:41, cuando Pedro se paró y habló… ¿a cuántos? A tres mil! Y Pedro habló con tanta autoridad, que la gente dijo: ¿Y ahora qué haremos? Arrepiéntanse, dijo Pedro, y crean en Jesús. Y ¿saben qué pasó? Esos tres mil huesos secos se convirtieron y después se bautizaron.

Si querés tener ese regalo, si querés tener la Vida Eterna, si querés pasar de muerte a vida, te invito a que cierres tus ojos y vamos a orar con la Autoridad que Ezequiel oró:

“ Amado Padre, amado Dios, tú eres eterno, tú no cambias, tú siempre eres fiel y tu palabra tiene el poder de otorgar vida, y vida en abundancia.

Señor te pido que entres en mi corazón. Que suban tendones, que suba vida. Que espiritualmente reciba la Vida Eterna”.

Jesús dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. (Juan 11:25 RV60)

Si tomaste esta decisión, te pido que hables con los pastores para que te ayuden a continuar.

Nos queda el último punto:

3-MORANDO BAJO LA SOMBRA DEL OMNIPOTENTE

Y esto nos toca a todos:

El que habita al abrigo del Altísimo

Morará bajo la sombra del Omnipotente.

(Salmos 91:1-2 RV60)

Todo en esta tierra, está preparado para que vos vuelvas a pecar. Todo está preparado para que te acuestes entre esos huesos queriendo ser como ellos, queriendo ser parte de ellos. Pero eso ya no va a poder ser porque has recibido la Vida Eterna. Esos altos y bajos que tenemos en nuestra vida cristiana nos hacen parecer que estamos entre un mar de huesos secos. Pero ¿saben qué? Hay algo que me sorprende del Salmo 91, dice: AL ABRIGO y A LA SOMBRA.

En el desierto, el frío de a noche penetra. Cuando nos encontramos en el mundo el frío del pecado nos penetra. Las noches en el desierto son frías. Los días quemantes, en el día no hay sombra y el sol pega fuerte y produce una sed insaciable.

¿Qué hacemos para no volver a ese lugar?

¡COLOCÁ SEMÁFOROS! ¿Qué hace un semáforo rojo? Da una señal de parar. Si yo lo paso a este semáforo en rojo, seguro te va a pasar algo.

Te aconsejo tengas estos diez semáforos en tu vida:

1-Si te da lo mismo ir a la iglesia que no ir

2-Si te da lo mismo orar que no orar. Esto es, a diario.

3-Si te da lo mismo leer la Biblia que no leerla.

4-Si te da lo mismo alabar que no alabar.

5-Si te da lo mismo ofrendar que no ofrendar.

6-Si te da lo mismo predicar que no predicar.

7-Si te da lo mismo obrar para Dios que no obrar.

8-Si te da lo mismo pecar que no pecar.

9-Clamá a Dios por tu vida y por los que están alrededor tuyo

Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. (Jeremías 33:3 RV60)

10-Te sentís solo, te sentís abandonado, que nadie te escucha? Que Dios es un Dios de multitudes?

Porque te tomé de los confines de la tierra, y de tierras lejanas te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú; te escogí, y no te deseché. No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia. (Isaías 41:9-10 RV60)

NO. DIOS ES UN DIOS PERSONAL. Aquí no está hablando en plural. “Te escogí, a vos te escogí”. YO TE QUIERO A VOS.

El te ama a vos y te dio el regalo: LA VIDA ETERNA. LLevate estas recetas a tu casa, escribilas en la heladera. “siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. El Dios omnipotente que abrió el Mar Rojo, si Dios está conmigo, quién contra mí? (Romanos 8:31).

Tengan cuidado. El mundo está dispuesto para que vuelvas a pecar. Lean la Biblia, oren, prediquen. Si cayeron, ¡LEVÁNTENSE! Una palabra que me bendijo muchísimo:

“La vida del cristiano no se mide por los éxitos que tiene, sino por la cantidad de veces que se levanta.”

Si te caíste… ¡LEVANTATE! ¡CLAMÁ A DIOS!

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