Por: Diego Brizzio Publicado con permiso. Todo para su gloria [Incluso mi forma de vestir o arreglo personal] Leamos 1 Timoteo 2.8-10: “Quiero pues que los varones oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda. Asimismo, que las mujeres se atavíen con ropa decorosa, con pudor y decencia, no con peinados ostentosos, ni oro, ni perlas, ni ropa costosa; sino lo que es propio de mujeres que profesan adorar a Dios, con buenas obras” (1 Ti 2.8-10). Pablo está corrigiendo algunas actitudes y conductas feas que los cristianos de Éfeso tenían cuando se reunían para dar culto a Dios. Tiene que corregir a los varones de una cosa, y a las mujeres de otra. A los varones los corrige en cuanto a la ira y la contienda. Parece que había varios varones que competían, discutían y peleaban en cuanto a la doctrina. Y Pablo les dice algo así como: “—Ya basta de querer ser los machos alfa de la doctrina, de querer imponerse sobre los demás. Purifíquense de eso, porque e...