La tragedia no es para nuestro consumo
CAROLINE STOLTZFUS Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso Guerras polémicas. Tiroteos masivos. Una celebridad que se ha ido demasiado pronto. Teatro político. Multimillonarios de la tecnología a juicio. En la sociedad actual siempre hay malas noticias que consumir y un buen incentivo para hacerlo. Estar informado es una virtud cultural moderna que pone de relieve nuestra aparente conectividad, atención y capacidad. Por supuesto, el periodismo sólido y la comprensión de los acontecimientos históricos y actuales son valiosos. Cuando los creadores cuentan historias con integridad, se hace justicia, se da voz a los que no la tienen y se inspira a generaciones para que utilicen sus talentos y sus recursos en beneficio del prójimo. Las noticias pueden ayudarnos a aprender, conectar y prosperar como individuos y comunidades. Pero, sobre todo cuando se trata de malas noticias, debemos reflexionar sobre cómo aborda