TODOS QUIEREN IR AL CIELO, PERO NADIE QUIERE MORIR
Por: Luis Caccia Guerra Un viejo dicho popular dice: "Todos quieren ir al Cielo, pero nadie quiere morir". ¿Será el temor a la muerte, ese innato instinto de conservación que como especie natural tenemos todos, o es que estamos demasiado atados a las cosas terrenales? La nube muere para ser lluvia de bendición para la semilla. La semilla muere para dar vida a una planta. La espiga de trigo muere para convertirse en harina. La harina muere para ser pan. No hay proceso de transición hacia estadios más altos, que no pase por la muerte de lo viejo para transformarse en una nueva vida. Para trascender desde lo terrenal hacia lo espiritual, lo terrenal tiene que morir con lo terrenal y lo espiritual tiene que irse con lo espiritual. Para llegar a la Tierra Prometida, hay que transponer el Jordán. Y no es una travesía fácil; de hecho, es la última y la más difícil de todas. SIN RETORNO, sólo viaje de ida. No hay otro modo. Y eso genera temor, mucho temor. Es na