Intercesión herida: Convierte tu dolor en oración
Trevin Wax Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso Bendigan a quienes los persiguen; bendigan y no maldigan ( Ro 12:14 ). El apóstol Pablo dio esa instrucción con una autenticidad nacida de la experiencia personal. Él mismo había estado allí, siendo un perseguidor, asintiendo con aprobación mientras Esteban era ejecutado; las piedras le quitaban la vida a golpes a un fiel seguidor de Jesús. Esteban clamó en sus últimos momentos: «Señor, no les tomes en cuenta este pecado» ( Hch 7:60 ), una oración moribunda que reflejaba el corazón de Jesús, quien en la cruz dijo: «Padre, perdónalos» ( Lc 23:34 ), adhiriéndose a Su propio mandato de «oren por los que los persiguen» ( Mt 5:44 ). Con cada piedra que le arrojaban, Esteban absorbía los golpes en su cuerpo, pero no respondía con maldiciones, sino con oración. Intercedió por quienes lo herían. En un giro notable, Dios respondió la oración de Esteban al rescatar a...