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Mostrando las entradas con la etiqueta Fabio Rossi

Sufrir nunca es en vano

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Ana Ávila • Fabio Rossi Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso El sufrimiento no debería tomarnos por sorpresa. Después de todo, es prácticamente una garantía de nuestro Señor. Pero la promesa de la aflicción incluye una oferta de paz. Una oferta de paz en la persona de Jesús ( Jn. 16:33 ). En los dolores del Dios encarnado es donde encontramos la certeza de que a Él le importa nuestro sufrimiento. Él venció al enemigo del pecado y la muerte, y ahora está usando cada aflicción para nuestro bien ( Ro. 8:28 ). Como escribe Elisabeth Elliot: “El amor de Dios no es un sentimiento; es un amor deliberado e inexorable que ordenará nada menos que lo mejor para nosotros” (p. 41). Esta es la discusión de nuestra lectura del mes de septiembre en  Coalición Lee . Coalición Lee es el grupo de lectura virtual de Coalición por el Evangelio. Cada mes leemos juntos un libro diferente y compartimos lo que aprendemos en nues

Cuando Dios te lleva a un desierto

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FABIO ROSSI Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso Cuando atravesamos un desierto –una crisis nacional, eclesial, familiar, o personal– solemos pensar que todo se trata de un ataque del enemigo, algo que no debería suceder y que no deberíamos aceptar. Sin embargo, el peregrinaje de Israel después de su liberación de Egipto nos recuerda que los desiertos no son solo cuestiones del destino, temporadas de “mala suerte”, o artimañas diabólicas. Ellos pueden ser lugares de transformación usados por Dios para nuestro bien. El propósito de Dios en el desierto El libro del Éxodo es uno de los libros más importantes de toda la Escritura. Ahí vemos cómo el pueblo de Israel había sido liberado de Egipto con la esperanza de la tierra prometida, un lugar donde vivirían en abundancia y paz. Pero luego de cruzar milagrosamente el Mar Rojo y presenciar la destrucción del ejército egipcio, lo que Israel vio en el horizonte

CRISTIANOS FRACASADOS y RESTAURADOS

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Fabio Rossi Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados-Publicado con permiso Nota del editor: Este artículo aparece en nuestra Revista Coalición: Las promesas del evangelio (Abril 2021). Puedes descargar GRATIS la revista aquí. Todos hemos sentido temor al fracaso. Tememos perder un examen, un negocio o una amistad. Nos tiemblan las piernas al pensar que podemos errar en el ministerio, hacer un mal trabajo o no ser buenos padres. Es una sensación horrible que golpea directamente al centro de nuestro ser trayendo culpa, frustración y desesperanza. Quizás por eso podemos identificarnos con Pedro, un discípulo determinado y entregado al Señor, pero que falló una y otra vez. Sus momentos de fracaso son memorables, ¿cierto? Tal vez recuerdes el más conocido, cuando afirmó con una firmeza admirable: “Señor, ¿por qué no te puedo seguir ahora mismo? ¡Yo daré mi vida por Ti!” (Jn 13:37), pero luego, solo unas horas después, lo encontramos n

Por qué Jesús nació en Belén?

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Fabio Rossi Coalición por el Evangelio https://www.coalicionporelevangelio.org/ Todos los derechos reservados - Se publica en este medio con permiso   La ciudad Belén (del hebreo Bethlehem , que significa “casa de pan”) tiene una larga historia en la narrativa bíblica. Por ejemplo, fue allí donde sepultaron a Raquel ( Gn 35:19 ); allí nació Booz, el esposo de Rut ( Rt 2:4 ); allí también nació y fue ungido el rey David ( 1 S 16:1-13 ); y José, el padre de Jesús, era procedente de Belén ( Lc 2:4 ). Este último dato es importante, porque al momento de recibir el anuncio del ángel acerca de la concepción y nacimiento de Jesús, José y María (quienes vivían en Nazaret; Lc 1:26-27 ) tuvieron que viajar hasta Belén para cumplir con el edicto del rey César Augusto, quien decretó un censo que obligaba a cada persona a inscribirse en su ciudad de origen ( Lc 2:1-5 ). Fue así como José y María viajaron a Belén, y “mientras estaban ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento”