Entradas

Una buena dosis de “Triple C” para un alma triste y solitaria

Imagen
Por: Luis Caccia Guerra para www.devocionaldiario.com No soy de tener muchos “amigos”. Hay personas que tienen legiones de amigos. Todo el mundo los quiere, todo el mundo los busca, todo el mundo quiere estar con ellos. Tienen cientos de seguidores en las redes sociales. Quien esto escribe ni remotamente es así. Justamente todo lo contrario. En todos los sitios a donde voy generalmente soy de perfil muy bajo, suelo sentarme en el último asiento del templo a menos que alguien me invite a hacerlo más adelante. Reservado, a veces muy reservado; tal vez demasiado reservado para ser más gráfico y directo. Días atrás, venía con uno de mis amigos luego del culto en el templo donde actualmente asisto. En el corto trayecto desde el salón hasta la calle, al menos siete personas lo pararon para saludarlo, mientras que en ese mismo lugar, en ocho meses sólo tres personas han preguntado mi nombre y excepto dos o tres, el resto ni siquiera sabe que soy escritor. Sólo soy capa

En mis temores, usa mi vida, Señor

Imagen
Por: Luis Caccia Guerra para www.devocionaldiario.com Hace poco ví una breve entrevista por TV a un famoso dibujante en nuestro país. En realidad la mini-entrevista formaba parte del programa, ya que durante el mismo, el entrevistado debía ilustrar un cuento para niños mientras éste se leía voz en off. Como en este caso, el relato era de miedo, una de las preguntas fue si cuando niño tuvo miedo. Como era de esperarse la respuesta fue afirmativa. ¿Qué niño no tiene o tuvo miedo? ¡Lo tenemos los adultos, miren si no va a sentir miedo un niño! Pero el dibujante decía que cuando tenía temor de algo, intentaba dibujarlo. Cuando lo veía plasmado en el papel y dibujado por él, como que ya no le tenía tanto miedo… Una manera un tanto particular para un niño de enfrentar sus temores… pero ¡absolutamente válida! Unas cuantas veces he hecho mención de mi problema para viajar en los medios de transporte. Lo he descrito como “síndrome vertiginoso”, “mareos”, etc. hasta que fin